IN MEMORIAM

Cuando alguien a quien quieres con todo tu corazón se va así,de repente,sin avisar,sin retorno;te quedas perdida en la niebla. Y sientes frío y una mezcla de sensaciones entre la tristeza y la angustia que ataca todos tus sentidos.Y más,si no te has podido despedir de tu ser querido. Te enfadas con la vida porque fue de manera súbita y no te avisó, y porque (como siempre he creído),la distancia es la peor enemiga. Pero con los años,me he dado cuenta que para los lazos del amor,la distancia no existe.
Tu alma se rompe en innumerables pedacitos de impotencia y frustración,dando paso al tan temido dolor.¿Cómo pedirle al alma que no llore por tanta ausencia?,¿Qué se nos quedó por decir?,¿Dónde están esos besos y esos abrazos que no nos dimos?.Nos gustaría volver atrás,detener el tiempo. Son momentos de sentimientos encontrados. Bailamos con la rabia,nos sumergimos en la negación y sabemos que no es la muerte la que nos asusta,sino el interminable dolor que conlleva este proceso. Porque la muerte no se supera:se abraza,se acepta,se integra...Sólo cabe esperar que el tiempo haga lo suyo para darle alas al dolor y que vuele en paz. Ese dolor que quiere liberarse a través nuestro,sin resistirlo,sin rechazarlo. Tenemos que dejar que el dolor sea,no resistir más,para poder apreciar ese cambio de frecuencia vibratoria. Y así,un día cualquiera,aparecen los recuerdos vividos con nuestro ser querido y los guardamos como si fueran nuestros tesoros y no los queremos perder. Porque sabemos que hay algo que ni siquiera la muerte puede romper,y es el amor. La vibración del amor siempre nos conecta con esa persona,es ahí donde nace el verdadero consuelo. Es en ese preciso instante,cuando nos reconciliamos con la muerte y somos conscientes que el tiempo es un gran maestro que nos conducirá a la sanación de nuestra alma.

IN MEMORIAM

Cuando alguien a quien quieres con todo tu corazón se va así,de repente,sin avisar,sin retorno;te quedas perdida en la niebla. Y sientes frío y una mezcla de sensaciones entre la tristeza y la angustia que ataca todos tus sentidos.Y más,si no te has podido despedir de tu ser querido. Te enfadas con la vida porque fue de manera súbita y no te avisó, y porque (como siempre he creído),la distancia es la peor enemiga. Pero con los años,me he dado cuenta que para los lazos del amor,la distancia no existe.
Tu alma se rompe en innumerables pedacitos de impotencia y frustración,dando paso al tan temido dolor.¿Cómo pedirle al alma que no llore por tanta ausencia?,¿Qué se nos quedó por decir?,¿Dónde están esos besos y esos abrazos que no nos dimos?.Nos gustaría volver atrás,detener el tiempo. Son momentos de sentimientos encontrados. Bailamos con la rabia,nos sumergimos en la negación y sabemos que no es la muerte la que nos asusta,sino el interminable dolor que conlleva este proceso. Porque la muerte no se supera:se abraza,se acepta,se integra...Sólo cabe esperar que el tiempo haga lo suyo para darle alas al dolor y que vuele en paz. Ese dolor que quiere liberarse a través nuestro,sin resistirlo,sin rechazarlo. Tenemos que dejar que el dolor sea,no resistir más,para poder apreciar ese cambio de frecuencia vibratoria. Y así,un día cualquiera,aparecen los recuerdos vividos con nuestro ser querido y los guardamos como si fueran nuestros tesoros y no los queremos perder. Porque sabemos que hay algo que ni siquiera la muerte puede romper,y es el amor. La vibración del amor siempre nos conecta con esa persona,es ahí donde nace el verdadero consuelo. Es en ese preciso instante,cuando nos reconciliamos con la muerte y somos conscientes que el tiempo es un gran maestro que nos conducirá a la sanación de nuestra alma.

A veces,la iluminación,viene uniendo 
la razón al corazón.
Desde el silencio,espero;y se que,al final
todo llega.
No tengo prisa,
hay tiempo para todo.
El tiempo es,exactamente,
lo que yo hago que sea y pase.
Estoy en el momento perfecto,
en el lugar adecuado
y con las personas indicadas.
Vivo este instante con bendición
y agradecimiento.
Aprecio poder ver en mi interior
un paisaje lleno de tranquilidad,
que choca con las prisas y confusión que hay a mi alrededor.
Sigo transitando por el Camino Rojo,el Camino de la Guerrera
con la poderosa seguridad
que me infunden mis espíritus protectores.Ahó!

A veces,la iluminación,viene uniendo 
la razón al corazón.
Desde el silencio,espero;y se que,al final
todo llega.
No tengo prisa,
hay tiempo para todo.
El tiempo es,exactamente,
lo que yo hago que sea y pase.
Estoy en el momento perfecto,
en el lugar adecuado
y con las personas indicadas.
Vivo este instante con bendición
y agradecimiento.
Aprecio poder ver en mi interior
un paisaje lleno de tranquilidad,
que choca con las prisas y confusión que hay a mi alrededor.
Sigo transitando por el Camino Rojo,el Camino de la Guerrera
con la poderosa seguridad
que me infunden mis espíritus protectores.Ahó!

CREO

Creo en mí,Mujer Todapoderosa
creadora de mi propia vida
y tejedora de mis sueños.
Creo en mi hija,
mi única hija
que fue concebida desde el Amor
más profundo y entero.
Y nació libre,
alegre y sana.
Y juega y ríe,
y baila y,también,llora
Y se funde con el Viento
y abraza a los árboles,
atraviesa corriendo el Fuego
y se diluye con el Agua
Y está sentada a mi lado,
que no es ni a la derecha ni a la izquierda
Y desde allí,las dos,
amparadas por la Luna,
nos dejamos llevar y sorprender,
porque nuestra vida 
siempre es Nueva.

CREO

Creo en mí,Mujer Todapoderosa
creadora de mi propia vida
y tejedora de mis sueños.
Creo en mi hija,
mi única hija
que fue concebida desde el Amor
más profundo y entero.
Y nació libre,
alegre y sana.
Y juega y ríe,
y baila y,también,llora
Y se funde con el Viento
y abraza a los árboles,
atraviesa corriendo el Fuego
y se diluye con el Agua
Y está sentada a mi lado,
que no es ni a la derecha ni a la izquierda
Y desde allí,las dos,
amparadas por la Luna,
nos dejamos llevar y sorprender,
porque nuestra vida 
siempre es Nueva.

VIDA Y MUERTE

De pie, junto al acantilado, acariciada por el viento gélido del mar, la espera. Está preparada…Cuando inició su viaje sabía que éste iba a ser un viaje sin final, un pórtico abierto a la vida, al amor…Ella fue su fiel compañera, pero la ignoró…

Despreocupada, con su bordón en la mano, relajada y sonriente. Sin miedo, su alma la espera, pero por su espalda le recorre una extraña sensación, un dèja vu.

En todo este tiempo, su dolor le impedía mirarla a la cara y reconciliarse con ella. La azotó tres veces, tres veces vio como un cuervo negro la rondaba. Cómo el tiempo corre y se le escapa con la razón nublada, sin encontrar respuestas a todos sus por qués!

Recorrió un largo camino, descubrió en su soledad y en su silencio toda la fuerza para enfrentarla.

Las noches eran largas y oscuras, las sombras iban mermando su luz interior. Su espíritu fugitivo vagaba, la luna era su mejor aliada y las estrellas, sus guías. Su andar era lento, contemplativo…y la sombra la seguía. Se le antojaba tan fugaz la vida!

Fue trazando su mapa emocional, venciendo sus miedos, luchando contra su ego mientras en su corazón llovía y temió enloquecer.

Cada anochecer, sus manos frías buscaban el calor del fuego protector y purificador. Cuando el sueño la vencía, el ulular del búho y los aullidos de los lobos, eran los guardianes de su reposo.

Ella le susurraba: “Quiero tu aliento!, Dame tu fuerza!”

Fue una larga travesía de lo que pudo ser y no fue…

Logró vaciarse, desprenderse de la transitoriedad de la existencia, de la noche sin tiempo. Conectó con el núcleo de sus energías liberadoras, con el dolor de la tristeza. Se sintió bailando y cantando en medio de una tormenta, vibrando caóticamente. Su cuerpo volvía  a ser flexible, elástico y se bañó en las heladas aguas del río: limpió y santificó su alma, abrazando su catarsis curativa esencial para poder a ser en paz, a sentir, sin pasado ni futuro. Sólo ser en el presente, en cada instante soltarse y dejarse fluir con la vida…

Mientras Ella conectaba con su ritual, la Otra la contemplaba, absorta ante su fracaso. La voz de Ella era tan potente y extática que, en ese instante, comprendió que debía abandonar su gesta. Pero no fue una despedida, sino, un hasta luego.

Ella permaneció firme, pero libre de inercia; relajada, pero segura con amabilidad hacia a ella misma, con alegría sanadora…El sol asomaba tímido entre la bruma oceánica y percibió cómo un cuervo desvanecía su vuelo en el horizonte. Se sentía como una diosa…

Vida y Muerte, siendo dos y queriendo ser una!...Vida que lleva a la Muerte y Muerte que nos arranca la Vida

VIDA Y MUERTE

De pie, junto al acantilado, acariciada por el viento gélido del mar, la espera. Está preparada…Cuando inició su viaje sabía que éste iba a ser un viaje sin final, un pórtico abierto a la vida, al amor…Ella fue su fiel compañera, pero la ignoró…

Despreocupada, con su bordón en la mano, relajada y sonriente. Sin miedo, su alma la espera, pero por su espalda le recorre una extraña sensación, un dèja vu.

En todo este tiempo, su dolor le impedía mirarla a la cara y reconciliarse con ella. La azotó tres veces, tres veces vio como un cuervo negro la rondaba. Cómo el tiempo corre y se le escapa con la razón nublada, sin encontrar respuestas a todos sus por qués!

Recorrió un largo camino, descubrió en su soledad y en su silencio toda la fuerza para enfrentarla.

Las noches eran largas y oscuras, las sombras iban mermando su luz interior. Su espíritu fugitivo vagaba, la luna era su mejor aliada y las estrellas, sus guías. Su andar era lento, contemplativo…y la sombra la seguía. Se le antojaba tan fugaz la vida!

Fue trazando su mapa emocional, venciendo sus miedos, luchando contra su ego mientras en su corazón llovía y temió enloquecer.

Cada anochecer, sus manos frías buscaban el calor del fuego protector y purificador. Cuando el sueño la vencía, el ulular del búho y los aullidos de los lobos, eran los guardianes de su reposo.

Ella le susurraba: “Quiero tu aliento!, Dame tu fuerza!”

Fue una larga travesía de lo que pudo ser y no fue…

Logró vaciarse, desprenderse de la transitoriedad de la existencia, de la noche sin tiempo. Conectó con el núcleo de sus energías liberadoras, con el dolor de la tristeza. Se sintió bailando y cantando en medio de una tormenta, vibrando caóticamente. Su cuerpo volvía  a ser flexible, elástico y se bañó en las heladas aguas del río: limpió y santificó su alma, abrazando su catarsis curativa esencial para poder a ser en paz, a sentir, sin pasado ni futuro. Sólo ser en el presente, en cada instante soltarse y dejarse fluir con la vida…

Mientras Ella conectaba con su ritual, la Otra la contemplaba, absorta ante su fracaso. La voz de Ella era tan potente y extática que, en ese instante, comprendió que debía abandonar su gesta. Pero no fue una despedida, sino, un hasta luego.

Ella permaneció firme, pero libre de inercia; relajada, pero segura con amabilidad hacia a ella misma, con alegría sanadora…El sol asomaba tímido entre la bruma oceánica y percibió cómo un cuervo desvanecía su vuelo en el horizonte. Se sentía como una diosa…

Vida y Muerte, siendo dos y queriendo ser una!...Vida que lleva a la Muerte y Muerte que nos arranca la Vida

METAMORFOSIS

Se despertó repentinamente, a causa de sus acostumbradas pesadillas. Noche tormentosa y calurosa…Imposible volver a conciliar el sueño.

En la calle, se escucha el camión de la basura haciendo su habitual recorrido. Algún que otro gato maullándole a la vida…

Él tenía el turno de noche. Justo hoy que podía descansar tranquilamente, el insomnio la acechaba. Pero son muchas noches en las que él no la deja dormir…Y, hoy está sola y asustada. Si pudiera salir volando!!. Camina hacia el cuarto de baño y se ve reflejada en el espejo: otra marca…y esa sombra en el pómulo derecho, sus piernas le flaquean. No duelen los golpes, no escucha sus gritos…Esto es parte de mi metamorfosis. Sí, me siento como un gusano, soy una crisálida, estoy en mi proceso, estoy esperando el momento…

Amanece, y el sonido de las llaves abriendo la puerta, acelera su corazón. “Hola, princesa!”.

Me veo en la bañera, el agua tibia acariciando mi cuerpo. La luz de las velas, titilando, formando bailes de sombras grotescas, mi copa de vino tinto descansa sobre la alfombrilla…busco la luz…

“Hola, princesa!”…Mi mejor música para mi mejor partida.

Revoloteando, me observo flotando en aguas color carmesí y mi más bella y sensual sonrisa; y mis potentes alas hacen alarde de mi baile de poder. Sobrevolando sobre su cabeza y viéndolo cómo se abalanza sobre mí…para salvarme.

“Princesa!!”…Y yo, mariposa rebelde, colorida, saltarina me despido de mi cuerpo inerte para comenzar mi nueva vida.

METAMORFOSIS

Se despertó repentinamente, a causa de sus acostumbradas pesadillas. Noche tormentosa y calurosa…Imposible volver a conciliar el sueño.

En la calle, se escucha el camión de la basura haciendo su habitual recorrido. Algún que otro gato maullándole a la vida…

Él tenía el turno de noche. Justo hoy que podía descansar tranquilamente, el insomnio la acechaba. Pero son muchas noches en las que él no la deja dormir…Y, hoy está sola y asustada. Si pudiera salir volando!!. Camina hacia el cuarto de baño y se ve reflejada en el espejo: otra marca…y esa sombra en el pómulo derecho, sus piernas le flaquean. No duelen los golpes, no escucha sus gritos…Esto es parte de mi metamorfosis. Sí, me siento como un gusano, soy una crisálida, estoy en mi proceso, estoy esperando el momento…

Amanece, y el sonido de las llaves abriendo la puerta, acelera su corazón. “Hola, princesa!”.

Me veo en la bañera, el agua tibia acariciando mi cuerpo. La luz de las velas, titilando, formando bailes de sombras grotescas, mi copa de vino tinto descansa sobre la alfombrilla…busco la luz…

“Hola, princesa!”…Mi mejor música para mi mejor partida.

Revoloteando, me observo flotando en aguas color carmesí y mi más bella y sensual sonrisa; y mis potentes alas hacen alarde de mi baile de poder. Sobrevolando sobre su cabeza y viéndolo cómo se abalanza sobre mí…para salvarme.

“Princesa!!”…Y yo, mariposa rebelde, colorida, saltarina me despido de mi cuerpo inerte para comenzar mi nueva vida.