Viviendo mi vida
recuerdo otras existencias.
Son mis vidas pasadas,
son sueños que no regresan
Recuerdos profundos,
momentos de alegría
y de dolor
que han dejado huellas...
Para hacerme más sutil
pero más sublime, al mismo tiempo.
Y recorro mi camino,
y recojo recuerdos,
y siembro anhelos,
quimeras y esperanzas...
Y vuelvo a recoger
y vuelvo a ofrecer...
No me importa la meta,
sólo sigo la senda.
La Luna y el Sol
son mis compañer@s de andanzas.
Me siento como Don Quijote:
seguiré riendo
y seguiré soñando...
No hay quejas ni lamentos
ni reproches,ni candados.
Sólo sigo la senda
y seguiré amando,
y seguiré creando mi futuro desde mi pasado,
desde el origen,
desde la misma raíz de mi árbol,
pero sin abandonar mi senda.
